Por lo general, el terreno rústico es un suelo sobre el cual, a priori, no se puede construir. Es decir, un suelo no urbanizable.
De todos modos, decimos “a priori” porque siempre hay excepciones.
Para conocer el tipo de terreno, primero se debe consultar la normativa autonómica y el planeamiento urbanístico municipal.
Si por esta vía la información fuese incompleta, entonces podemos solicitar la cédula urbanística al Ayuntamiento pertinente.
Por último, otra forma de revisar esta información es a través del catastro.
He comprado un terreno rústico. ¿Puedo construir en él?
Esto va a depender de la normativa de cada Comunidad Autónoma.
En Cataluña, la comunidad en la que trabajamos como gestores hipotecarios, el 94% de la superficie territorial es suelo no urbanizable.
El Marco Legal, en este sentido, es muy amplio. Existen varias Leyes, Decretos y Textos Refundidos de la Ley de Urbanismo que regulan este ámbito.
Son muchas las posibilidades en estos tipos de terreno:
- Nuevas construcciones
- Rehabilitaciones de masías y casas rurales
- Intervenciones en edificaciones preexistentes
Con lo que dependiendo de la situación que prefieras o necesites deberás informarte de una forma u otra.
Si todavía no tienes esto claro, te aconsejamos que visites la página web de la Generalitat, en el Departamento de Territorio y Sostenibilidad.
Aquí podrás encontrar más información al respecto.
Tengo la posibilidad de construir en un suelo no urbanizable. ¿Cómo consigo financiación?
Una vez tengas la certeza de poder construir sobre un terreno rústico, o bien reformar una vivienda ya construida, tienes varias opciones de financiación.
- Hipoteca autopromotor. Esta hipoteca es un producto financiero enfocado a la financiación de la construcción de una nueva vivienda. Ofrece diferentes opciones:
- Ya tienes el terreno. Si ya tienes el terreno, el producto es capaz de financiar hasta el 100% del proyecto. Siempre dependiendo de cada situación.
- Necesitas financiar el terreno y la construcción. En este caso, el producto únicamente ofrecerá financiación del 50% para la compra del solar, y hasta el 70% del proyecto de construcción. Con lo que necesitarás algo más de capital propio para invertir antes de empezar.
- Reformar una finca rústica. Otra de las situaciones en las que podemos necesitar financiación es en la reforma de una finca rústica. Por ejemplo, cuando se tiene una masía antigua que necesita una reforma.
- Comprar una finca rústica. Esta opción es la más común de las tres en Cataluña. De hecho, hace poco escribimos un artículo sobre cómo hipotecar una finca rústica.
Este último, además, fue el caso de uno de nuestros clientes, Arturo, que consiguió adquirir su finca rústica gracias a la hipoteca contratada con Firmax:
Si te han quedado dudas, o te gustaría realizarnos alguna consulta al respecto, no dudes en contactarnos.